jueves, 22 de marzo de 2007

Joshua y Antonio

Supongo que de todos es conocida la gran amistad que mantuvo en vida el doctor Emilio Greenberg con el pianista judío Joshua Edelman. Solía contar el maestro que se conocieron en un local de jazz de Manhattan allá por los 70, y que Joshua en seguida le llamó la atención por su inusual timidez y humildad, cualidades que como bien sabeis, no suelen abundar entre los músicos del sagrado estilo.

Edelman vive en el barrio de La Latina desde finales de los 80, y forma parte, junto con músicos como Perico Sambeat, Bob Sands, Javier Colina, Pedro Iturralde y muchos más, de la escena del latin jazz en Madrid. Se le puede escuchar casi todas las semanas en el circuito madrileño, desde el Bogui Jazz al café Central, pasando por el Bar&Co, la Sala Clamores o el Café Berlin. Tampoco se le caen los anillos e incluso está dispuesto a tocar en tu fiesta de cumpleaños por un módico precio. Dentro de cosa de un mes tocará junto a su trío y al deslumbrante y prometedor Antonio Serrano, un joven armonicista que con sólo 33 años ha tocado junto a muchos de los grandes músicos del panorama musical actual español. Fue introducido a la música a los siete años por su padre y desde entonces su formación no se ha detenido ni ha conocido fronteras: estudió solfeo, piano, violín y percusión en los conservatorios de Madrid y Alicante, ha participado en grabaciones con artistas como Vicente Amigo (mi primo), Carles Benavent, Pedro Guerra, Joaquín Sabina o Navajita Plateá, y desde que se inició en el jazz, con monstruos de la talla de Chano Domínguez , Paco de Lucía y Tomatito.

El próximo 14 de abril en el Círculo de Bellas Artes, y al día siguiente en el Contraclub, Joshua Edelman y Antonio Serrano volverán a compartir escenario para deleitarnos con un repertorio que auguro memorable. Y como prueba, aquí os dejo el precedente: “En el Central”, su disco conjunto en directo del año 2000.

Las entradas para el concierto del CBA ya están a la venta en Atrapalo.com a 10 euros, como bien informa nuestro querido amigo Juanbo. Yo he reservado 5, así que quien se apunte, que diga algo.

Bradomín

"...me considero un buscador de los sonidos bellos, y allí donde encuentro armonía, descanso y observo, aprendo, hasta que vuelvo a sentirme con fuerzas para seguir en la búsqueda, que espero, nunca se acabe." Antonio Serrano, aunque parezca calcado de un libro de Greenberg…

lunes, 12 de marzo de 2007

Concierto de Matt Elliott

Amiguitos y amiguitas, discípulos de Greenberg,


Como sabeis, o deberíais saber, el próximo sábado 17 toca en nuestra humilde ciudad el enigmático Matt Elliott, presentando su nuevo disco "Failure Songs". No quiero extenderme demasiado en quién es este artista, antes conocido como The Third Eye Foundation, por entender que contamos en este blog con personas mucho más preparadas que yo para hablar de él. Así, espero que nuestro colaborador Pablo L.T., nos ilustre pronto con su inabarcable saber, para desvelarnos algunas de las dudas que ya nos asaltan a muchos: ¿Cuántos músicos hay? ¿Qué instrumento toca Matt? ¿Quién diablos es "Manyfingers"?

El precio de las entradas es de 13 euros, si se compra anticipada, 15 en el día. El lugar, la sala Galileo, en la encrucijada que se forma entre la misma calle Galileo y San Francisco de Sales, muy cerca de la sede norte del Frente Anti-Pachanga.

Ya han confirmado su asistencia grandes estrellas, como nuestros colaboradores Bruce Alberts y Pablo L.T., , así como la Kika y Raquel, aunque no se descartan nuevas incorporaciones. Sorprende la ausencia de nuestro amigo mizz, el simpático italo-egipcio, que se perderá la gran velada.


Como adelanto, os invito a escuchar la primera y la última canción de su penúltimo disco, “Drinking songs” que corresponden a los dos extremos de cómo puede ser el concierto. Podeis descargaros el resto del disco aquí, por cortesía del CSIC. Un abrazo y espero veros a todos el sábado,


Bradomín



jueves, 8 de marzo de 2007

Polmo Polpo..Like Hearts Swelling


Hay musica para la mañana, musica para cuando quieras destruir todo lo que partenece a tu campo visual, musica para andar en la ciudad y fijarse en los rostros de la gente, musica para viajar por el verano en un desierto (ry cooder..) y hay sonidos que solo admiten las vibraciones producidas por los altavoces, no permiten que haya ruidos de fondo y no permiten que tu mente esté ocupada en algo que no sea escuchar.
Este disco es nocturno y electrico y hay que escucharle en el mero sentido de la palabra; te pide que por 47 minutos le des toda la atencion que puedas, y hay que relajarse y dejarse llevar por la mezcla de sonidos de guitarras y violinos.
Es un disco ambient y podria ser parte de una banda sonora que nos habla del final de una fiesta de boda mejicana, de cuando ya no hay nadie y el sol todavia no calienta nuestra piel y quedan solo los restos de las luces puestas para festejar el evento.
No hay que poner canciones sueltas, hay que escucharlo todo de un tiron desde el principio dejando su proprio orden de las pistas porque casi no se oye la diferencia entre una u otra cancion...y cada cambio es mas una pausa que un pasar a la pista siguiente.

Os diré algo de Polmo Polpo que es el alias de Sandro Perri, musico Canadiense con origines Italianas. Estudió Jazz y luego descubrí su pasion para la Electronica. Actualmente sus discos están producidos por la mitica Constellation y partenece al escenario musical creado por A Silver Mt Zion y Godspeed you Black Emperor!

Una curiosidad: requiem for a fox está dedicada a Todd Fox, musico y amigo de Sandro Perri, que murió ahogado con su hermano gemelo. La cancion fue compuesta por Sandro Perri mezclando variantes de grabaciones que hicieron los dos juntos justo antes que Todd muriera

01.romeo heart
02.requiem for a fox
03.farewell
04.sky histoire
05.like hearts swelling

martes, 6 de marzo de 2007

Concierto para sho y concha gigante, de John Cage


Un apunte ligero sobre música contemporanea:


Hace unos meses asistí en Alemania a un evento que solo en Berlín, y quizás Viena, puede atraer a más de seis personas. Muchos diréis: "una cata de chucrut", y con razón, pero me refiero al otro evento: un concierto de John Cage. Salí del mismo lleno de visión zen, de amor por las setas y de inspiración para transmitir mis observaciones sobre la nueva música, que son tres y muy importantes:

- En un concierto de nueva música, no haces más que escuchar los ruidos estomacales de tu vecino. No es que en Alemania sean monstruosamente ruidosos, sino que en una sala de acústica perfecta con 200 personas en silencio absoluto, en la que lo único que suena es una concha gigante rellena de agua (sí amigos, John Cage es así) se presta la cosa a estas observaciones sobre esos alegres pitidos gástricos. Si lo que suena es el vibrador de un teléfono, pues ya no oyes la concha. Y olvídate de sonarte en el típico subidón. Ésto no es la Novena Sinfonía de Bethoveen.

- Los músicos se pasan más tiempo contando las pausas que tocando música. Juro que vi al que tocaba el shakuhachi (o que no lo tocaba) intentar no dormirse durante una pausa de siete minutos. Que se dice pronto...

- El radical (y muy acertado) concepto de Cage según el cual se debe introducir el espacio en la música (es decir, con los músicos repartidos por la sala) da lugar a ciertas paranoias. Dónde aparecerá el siguiente? Están debajo de mi asiento? Con todo, si el que está detrás de ti no es percusionista, sobrevivirás.

Ah, y la cita... Ésto se lo dijo una señora a Cage mientras miraban un cuadro de Rauschenberg:

"Si no es arte, entonces me gusta".

Y se quedó tan ancha como el tío que tocaba el shakuhachi cuando tras siete minutos, tocó una nota con todas sus fuerzas y dio fin a la velada. Aplaudimos a rabiar, y muchos se sonaron los mocos.

domingo, 4 de marzo de 2007

Más por las mañanas...

Hola a todos, discípulos de Greenberg. Es un honor para mí poder participar en este modesto foro de discusión de la inabordable obra del gran doctor. Ya fuera en los pasillos de la facultad o en los locales de jazz madrileños, fue siempre nuestro profesor.

Y para empezar, en respuesta a la última entrada del extravagante Marqués de Bradomín, ahí va mi lista de canciones para varias mañanas posibles.

- Para las mañanas tranquilas del fin de semana y como parte de mi iniciativa "Mañanas con Soul", yo reivindico el pelo afro. Desde Al Green (
I think it's for the feelling) y el Dictionary of Soul de Otis Redding (FA Fa Fa Fa Fa (Sad Song)), hasta los maestros Funkadelic (Can you get to that), con George Clinton al frente. Entre semana, estoy muy de acuerdo con el gusto de Bradomín por Van Morrison (sin olvidar al gran John Martyn).






- Un clásico de las mañanas: las fiestas y cómo sale uno de ellas,

14:35 del lunes 1 de Enero de 2007. " [...] Te levantas del sofá de la casa de tu amigo Rufo y durante unos segundos, das tumbos por la habitación en penumbra. Resacoso y mareado, sales de la sala en silencio y avanzas por el pasillo tropezando con sillas, globos, vasos de plástico y gente. El panorama de cuerpos dormidos en posturas y lugares inverosímiles te aturde y sientes miedo. ¿serás el único superviviente de la fiesta?...". ¿Qué musica os pega para esa situación? Música de miedo, claro. ¿Y qué da miedo? Lo que más miedo me da a mí es el regaetón, pero no os insultaré poniendo eso aquí, amigos; temas inquietantes para una mala resaca:
Bela Lugosi's Dead, de Bauhaus, The Holy Hour, de The Cure o Red Right Hand, de Nick Cave. Para no salir del pozo.






- Otra situación para música oscura son los lunes por la mañana, cualquier lunes. Ir a trabajar un lunes de invierno, con lluvia y atasco, aplastado contra el cristal de un autobús hasta los topes y sabiendo que es evidente que además llegarás tarde, también dá miedo. En una situación así, por la radio del conductor del bus debería sonar Ballad of a Paralysed Citizen, de The Faint. Una buena receta para enfrentarse a los lunes, son las dosis moderadas de temazos de toda la vida. The Joker, de Steve Miller Band y ese tipo de cosas (el Exile on Main Street de los Rolling, algo de los Specials...etc,etc). Si nada de esto funciona: jazz del bueno.

- Y por último, si lo que uno quiere es forzar el optimismo sin importarle las consecuencias, yo creo que siempre dan un toque de elegancia al primer café cosas como
Brazil, de Geoff Muldaur (sin duda pensada para cantarla en la ducha) o Django Reinhardt.

sábado, 3 de marzo de 2007

Por las mañanas...

Como todos vosotros habreis comprobado en innumerables ocasiones, las mañanas son un gran momento del día para escuchar música. Debe tener algo que ver con el hecho de estar todavía medio dormido, y que el cuerpo no sea capaz más que de retener pocas cosas lo que hace que durante las primeras horas del día todo suene mejor. Eso sí, uno se pone "Godspeed you black emperor!" o algún popero deprimido, y al carajo el resto del día. Así pues, me gustaría hacer mi pequeña selección de grandes temas para “por las mañanas” y espero fervientemente la vuestra. En cada link va la canción correspondiente:

  1. Algunos días de diario uno se levanta como siempre, se da una ducha y al estar bebiendo tranquilamente el café se da cuenta de que había puesto mal la hora y que en realidad va media hora tarde. Casi instantáneamente, en ese momento debería sonar en vuestra cabeza "The Power of Love", de Huey Lewis and the News, y entonces uno casi echa de menos no ir en monopatín al trabajo.
  2. El fin de semana puede traer sorpresas agradables. Volver a casa un sábado por la mañana estrenando medalla de capitán trae inseparablemente unido ese clásico de Louis Prima que es "Just a gigolo". En casos de arrepentimiento, tampoco está mal emprender la retirada matutina con un buen blues.
  3. Si hay algo que anima las mañanas es una buena dosis de ska. Del de la vieja escuela, claro, algo de Toots and the Maytals , de los New York Ska Jazz Ensemble o de Jazz Jamaica All Stars. Recomendado especialmente si tienes que trabajar un sábado o un domingo por la mañana.
  4. Si bien Bob Dylan no es la alegría de la huerta, me gusta el "Blood in the tracks" de camino al metro. "Tangled up in blue" y "You're gonna make me lonesome when you go" me dejan en un agradable estado de sopor que hace más soportable el madrugar.
  5. Para los que prefieren ir despertándose poco a poco les sugiero este tema de Metric que se llama "IOU."
  6. ... Y cuando no tienes prisa, un poquito de Mastretta...
  7. Por supuesto, no podría faltar alguna alusión al maestro en esta lista. Una de mis favoritas mañaneras es "Wild Night", del Tupelo Honey, que también vale para justo antes de salir de fiesta. Tampoco se quedan atrás "Bulbs" o "Come Running", del Veedon Fleece y el Moondance respectivamente.
  8. El único placer que me deparan los lunes por la mañana es bajar las escaleras escuchando “Welcome to the working week”, del disco “My aim is true” de Elvis Costello
La lista, por supuesto, es interminable. Y ya sabeis, si la conexión no os va demasiado bien y no podeis bajaros todas las canciones, ... Bajaros sólo las de Van Morrison...

viernes, 2 de marzo de 2007

Bueno, poco a poco parece que se va apuntando más gente. A los que querais escribir, que sepais que teneis que haceros una cuenta en GMail. Si ya la teneis, pinchais arriba a la izquierda en "Acceder" y luego en "Acceder desde una cuenta Google" o algo así. Una vez dentro ya es como para tontos.

Los que no vinisteis ayer, que sepais que os perdisteis un pedazo de concierto, pero para resarciros os regalo un episodio de Pocoyo, y de paso tomais nota de cómo se baila correctamente el 2tones.